Buscando a Lucy Kuo

Quién lo iba a decir que iba a ser la nueva jefa de la NSA, vivir para ver. Al entrar en las oficinas muchos agentes me miraron mal. Como si fuera un demonio o algo. Bueno, era el demonio de Empire City, así que era normal. Pero rápida vino Kuo a recibirme antes de que nadie me dijera nada.

- ¡KUO! - Añadí feliz - Me alegro de verte.

Me saludó y me llevó a su despacho.

- Una conductora es la mayor agente de la NSA. Supe que llegarías a ese puesto, ya sabes después de mi resurreción. - Me quedé medetibundo - Pero no es eso de lo que quería hablar contigo, Lucy, el mundo da señales de volver a enloquecer: La gente no sabe como tomarse todo esto de los conductores, parece que tienen en la cabeza todavía que deberíamos estar extintos, y hay opiniones diversas, como antes, y los nuevos conductores... Demonios, ya no saben que hacer, unos se han vuelto locos y otros no tienen ni idea de a que enfrentarse, hay muchos que no sabrían ni defenderse aún teniendo poderes, otros opinan que su vida a cambiado para mal y se descarrían. - Hice una pausa - Hay mucha gente, muchos humanos, DARPA también, que los quieren muertos o ser usados como conejillos de indias, y necesitan proteción, pensé en la NSA, en tí, tu podrías instruirlos como yo lo hice en su día contigo. No tengo mucho tiempo Kuo, siempre hay gente que debe ser activada, si mi papel es ayudar a que el mundo avance, y evolucione no puedo ir enseñando a todos individualmente. Por eso necesito que me saques de este aprieto.

- Cole, vas muy rápido, tranquilo.

Kuo miró un montón de papeles.

- Desde luego no te has dedicado a los nuevos conductores, muchos de ellos atacan bancos y destrozan mobiliaro público. Recibo quejas de muchos superiores del Pentágono. Pero de acuerdo, intentaré que esos militares se metan en la cabeza que los conductores pueden ser ciudadanos y pacificadores.

Kuo alzó la vista.

- Desde luego siempre tengo que limpiar lo que ensucias. Anda, saluda a Zeke de mi parte, yo me ocuparé de ese nuevo proyecto. Otra cosa, con esto me estás diciendo que quieres hacer un ejército... ¿Tan mal estamos?

- No sabes cuanto me alegro de oírte Kuo. Iré ahora mismo a Empire a decírselo a Zeke.

Abrí la puerta del despacho.

- Me mantendré en contacto contigo.

Salí de la habitación.